Cuando una mujer te pide tiempo para pensar, es que ya ha pensado.Y ni bajo tortura confesará que ha estado contigo y con otro a la vez.
Yo no quedaría a la primera. Si quiere quedar, y consigue decirlo en la primera frase, antes de que cortes…la dices, hoy no puedo, ya te llamaré. Y sigues de la misma manera.
Lo de decir «ya te llamaré» es importantísimo. Porque al «olvidarte» las pone en alerta de si realmente es cierto que te puede perder.
El contacto 0 se recomienda para recuperarse uno mismo, que es lo primero que hay que hacer cuando alguien es dejado. Pero, no te quedes sólo en lo superficial. Te explico. Cuando alguien te deja, significa que no te quiere. O por lo menos que no te quiere de la misma manera que antes. Cuando alguien toma esa decisión, nuca ocurre de un día para otro y porque si, como nos parece, sino que detrás hay un proceso de desenamoramiento de meses.
Enfrentarse al dolor es bueno, te hace renacer. Lo que es malo es acercarse a la fuente de dolor. De éstos momentos malos, una persona fuerte aprende mucho. Hazte la pregunta siguiente y grábala en tu cabeza. ¿Por qué merece ella después de tratarte como lo ha hecho, que derrames lagrimas en su nombre? ¿De verdad estás dispuesto a perder tu batalla contra ti mismo, por alguien que ha demostrado que no te quiere? Dentro de poco estarás muy por encima de eso.
Solo tienes 2 opciones:
No recuperarla, y no recuperarte, o no recuperarla y recuperarte. Todo lo que salga de ahí es como intentar cambiar la órbita de la luna. No puedes. No se te escapó, se fue, porque ella quiso, y una vez que hizo eso, tu no puedes hacer nada por que vuelva, y sí mucho por tí. Ánimo, porque lo estás haciendo bien y en breve verás cómo da la vuelta todo, y tu estarás ahí, arriba, para contemplarlo.
Enamórate de alguien que te ame, que te espere, que te comprenda aún en la locura; de alguien que te ayude, que te guíe, que sea tu apoyo, tu esperanza, tu todo. Enamórate de alguien que no te traicione, que sea fiel, que sueñe contigo, que sólo piense en ti, en tu rostro, en tu delicadeza. Enamórate de alguien que te espere hasta el final, de alguien que sea lo que tú no elijas, lo que no esperes. Enamórate de alguien que sufra contigo, que ría junto a ti, que seque tus lágrimas, que te abrigue cuando sea necesario, que se alegre con tus alegrías y que te de fuerzas después de un fracaso. Enamórate de alguien que vuelva a ti después de las peleas, después del desencuentro, de alguien que camine junto a ti, que sea un buen compañero, que respete tus fantasías, tus ilusiones.